miércoles, 18 de abril de 2012

SÉ QUE FUE UNA PRIMAVERA

                

        No lo puedo precisar
        si había nacido la primavera
        o caminaba libre en su despertar.
        Lo que si recuerdo y vivo está,
        es que fue la vez primera
        que vi tu pelo volar
        y aquella ardua cabellera
        de rubio y fino azafrán. 

         El aire dibujaba en tu veste
        olas que diría del mar.
        No vi el color de tus ojos
        por la distancia quizá
        o porque escondías la mirada
        trémula al verme pasar,
        sobre aquella yegua blanca
        al regresar de labrar.

        Tan sólo por un instante
        cruzamos nuestras miradas
        y no supe el reaccionar.
        Te dije, –Hola, sin mas
        y tu como una amapola
        me contestaste igual.
        Tú, tenias trece años
        yo tan sólo uno mas

         Fue la primera vez
        que sentí frío en el alma.
        Tiritó como una pluma
        mi aliento al respirar.

        Qué extraña tal sensación.
        La explosión de tu mirada.
        como un volcán en erupción
        despertó en mi corazón
        lo que nunca imaginara.    

        No hablamos apenas nada,
        con un hola, nos bastó
        para firmar el compromiso
        que el cielo nos regaló.

        Ni con los años, ni el viento,
        ni con los rayos  del sol,
        sean podido borrar
        aquella llama de amor.

         Sigue viva en la distancia
        como el fuego en un crisol;
        donde quedaron fundidas
        dos vidas en un corazón
        y no abra quien las extinga
        mientras vivas tú o yo,
        o haya una primavera
        donde creciera alguna flor.
                     *

1 comentario:

RAMA-TEO dijo...

Me ha gustado mucho este poema. Que Dios le bendiga.Un abrazo.