miércoles, 29 de septiembre de 2010

UNA MEMORIA DE AMOR...

Dedicada a nuestros hermanos
de centro América,
y un tanto de desconsuelo
por aquellos que sufren los
incomprensión de los hombres
en Bagdad

Cómo me gustaría ser un niño
y soñar con reyes magos
y cabalgar en un reno
en todo el globo terrenal,
y poder llevar montañas de cariño,
para llenar el mundo, de paz y felicidad.

Soñar ¡Sí, eso es lo que quiero!
para luego despertar
con la luz, de un mundo nuevo,
donde todas las mamás
sin pudor dieran el pecho,
donde lloviera el maná.

Me gustaría ser piloto
de una nave sideral
y bombardear la tierra,
en los lugares remotos
con bombas de dulce paz
y llegar a Nicaragua
y borrar el huracán.
Afluyendo agua y miel
en unos ríos de pan.

Quisiera poder soñar
que vuelo a las cuatro
esquinas
del gran orbe terrenal
y soñar con las guerras
que terminan
en toda raza y lugar.

Soñar que mando misiles
hechos de nata y de flan.
Soñar que ya los fusiles
a nadie, matar podrán.

Gritaría como un niño
lleno de felicidad,
a los hombre del poder.
–Hacer guerras de cariño
y con dulzura, dialogar.

¡Cómo no voy a soñar!
si en esta parte del sol
sobra generosidad.
Al decir, española o español
es decir que la bondad
nos nace del corazón
cuando hay necesidad.

Siento miedo de ser hombre
y como niño soñar.
Siento horror por esos pobre
que el hombre hace llorar.
Quisiera soñar, Dios mío
con la paz y sin soñar.
Y en mi alma siento frío
cuándo veo tanta maldad.

dame un sueño que convierta
mis sueños en realidad,
y llame el hombre a una puerta
donde sólo halla bondad.

No quiero vivir despierto
porque me hace llorar.
Prefiero dormir o muerto
y con mi sueño callar
el grito del pensamiento
que no deja de gritar.
–Gritar a los cuatro vientos
dejad hombre de matar.

martes, 28 de septiembre de 2010

SONETO

LA TORTILLA ESPAÑOLA.

El abrasaste fuego con su llama
convirtió el tubérculo en arcilla,
ya que desde el centro hasta la orilla
la sonrojan con las brasas de la flama.

El propio y extranjero la reclama,
por el almizcle que tiene la tortilla
y de la mano de su hermana la morcilla,
dá prestigio a España, por su fama.

¿Y Quién no hizo algún alto en el camino,
en la fonda, hotel o la posada
y degustó con la tortilla un buen vino?

Sería, casi decir que no hubo nada
más allá de este mundo peregrino,
donde llega algún alma en su escapada.

lunes, 27 de septiembre de 2010

MUSICA DEL PENSAMIENTO.

SONETO.

Cuando veas algún hombre pensativo
con su vista perdida en lontananza.
Seguro es que en su pecho la añoranza
se mantiene en su alma cual cautivo.

El hombre al soñar siempre está vivo,
ya que en sueño mantiene la esperanza
y le inyecta al corazón la confianza
que convierte algo de él, en positivo.

Dejadle, por favor soñar despierto,
si para él, es la paz y felicidad
y siente de las sombras alguna voz

que dá forma a las quimeras de aliento
y que amamanta en sus auras la bondad,
ya que vuela con sus sueños hacia Dios.

miércoles, 22 de septiembre de 2010

SI PUDIESE DESPERTAR...

Si pudiera despertar
para saber sí mi sueño
fue algún día realidad.
Si lo fue, ya está tan lejos
que no puedo recordar
de su cristal los reflejos,
ni su nombre, si es real.

Sólo sé que es una sombra
lúcida como el cristal
que me araña el corazón
y no me deja ni andar.

Cuando creo que despierto
y veo que estoy dormido,
ya no sé si es que estoy muerto
o en las garras del olvido.

Porque veo mi pensamiento
que en el tiempo se ha escondido,
y lo llamo y lo llamo,
y lo llamo desde adentro
de mi ser como un mendigo.

Y el cristal que nos separa
del ensueño que he tenido
no deja pasar los gritos,
y que los escuche ella,
si es que en realidad ha existido

Tal vez que esté en las estrellas
o quizá en mi interior,
donde aún siento sus huellas
como la explosión mayor
de las dulzuras más bellas.

Cuando me duermo, al soñar
siento caricia de ella,
igual que cuando su faz
la ponía sobre la mía
para poderla besar.

Por eso, en mi fantasía
seguirá inmortalizada
mientras que en mí haya vida.
Y bien sé que aún más allá
estará en mi ser metida,

como en los mares la sal,
hasta que el Orbe se extinga,
yo sé, que aun vivirá
en mi corazón dormida
por toda una eternidad.

martes, 21 de septiembre de 2010

LUCES DEL ALMA.

Contemplando el firmamento
veo en ello tal grandeza:
qué pequeño que me siento
soy una átomo del viento
que termina donde empieza

Voy mirando el astro Rey
que me deslumbra los ojos.
Qué pequeño viento soy,
sólo una nada a su antojo
y en éste pensar estoy
soñando que a él, le cojo.

Estrellas del firmamento
que me gusta contemplar
aunque soy pequeño y viento,
quiero entre ellas saltar.
Sueño que las voy corriendo
y que las puedo hasta alcanzar.

A medida que los tiempos
van avanzando por mí,
más lentos se hacen los vientos
que se quedaran aquí.

Ya sólo seré un lamento.
Lamento ya sin sentir.
Alguien pensará que fui
un día parte de un viento.
¿Existí o no existí?
Ya sólo seré un recuerdo
que se borrará al fin
y pasaré a ser un cuento.

Estaré en las estrellas
bordando el Universo,
he iré saltando por ellas.
Mi sueños serán por eso
una realidad muy bella.

¡No termino! Es qué empiezo.
Dejo plasmado en poemas
de lo que creo que fui
de un viento o una quimera.
Quizás que un suspiro fuera
de brisas que yo fingí
de una supuesta cadena
sin eslabones que abrir.

Viento que sopló algún día
y las flores fue moviendo.
El mismo viento sabía
que se marcharía corriendo
y que sólo quedaría
parte de su pensamiento.

Pensó que fue un huracán
que con el mundo podía
y sopló sin descansar,
a pesar de que él sabía
que su soplo no fue nada
de la brisa que sentía.

lunes, 20 de septiembre de 2010

UN SONETO.

Si por la pluma no descubres al poeta,
será porque es vana su escritura.
Es difícil descubrirle su figura
ya que siempre utiliza una careta.

Bajo el palio de sombra de él, supuesta
y sepultada en sonrisa de amargura.
Como a un feto en la negra sepultura,
donde no hallara abertura a cuya puerta.

Él siempre pone el escudo en la bandera,
apoyada en los pilares del silencio.
Dejad ver de su pluma la escritura,
tatuada como fuego en la madera.

Y fabrica lo real en serventesio,
de poemas con palabras de hermosura.