lunes, 13 de noviembre de 2017

CUANDO DIGO QUE ESTOY SOLO.



Cuando digo que estoy sólo,
yo no digo la verdad.
Miro y el mar y estrellas,
el cielo y el más allá
y esa imágenes tan bellas
les dan luz a mi soledad.

Vivo con tu compañía
amada esposa Dolores,
como en los primeros días
que todo fue de colores
porque Dios nos bendecía
al ver tan lindos amores.

Solos como el primer día
nos encontramos, mi amor.
Pero llenos de alegrías,
dándoles gracias a Dios.
por su sacra compañía
que nos dad crus sin dolor.

Porque Dios, esta en nosotros
como luz del mismo sol
que ilumina a tantos otros,
con el mismo resplandor
que destella de su rostro,
con bondad y dulce amor.

Ya no estoy sólo, mi amor;
te tengo en mi presencia,
lo mismo que al propio Dios,
con su Gran beneficencia
que nos derrama a los dos.

Por lo que insisto, mi amor,
solos como el primer día
que compartimos esa flor
de ardor y de hipocondría,
sin sentir ningún dolor

a las penas que vendrían,
sin restarle la ilusión
al fuego que nos unía,
más allá de la razón
que no muere ningún día.
               *

No hay comentarios: